Esta, puede que sea una más de esas estúpidas y desapacibles tardes de invierno, en las que el escueto todo y la nada -delirantemente-, barajan las escasas probabilidades que tengo, de conseguir la clemencia de tu cuerpo desnudo, del calor de tus favores.
Pero continúo imaginando !
Sobre la mesa, en el sofá, la cama, la alfombra, el ascensor, la centrifugante lavadora ...
sobre la nada, sobre el escueto todo.
Fotografía, Fab Llanos.