Dos amantes dichosos
Son una sola de gota de luna en la hierba
dejan andando dos sombras que se reunen
dejan un solo sol vacio en una cama
De todas las verdades eligieron el día
no se ataron con hilos sino con un aroma
y no despedazaron la paz ni las palabras
la dicha es una toma transparente
El aire, el vino van con los amantes
la noche les regala sus pétalos dichosos
tienen derecho a todos los claveles
Dos amantes dichosos no tienen fin ni muerte
nacen y mueren muchas veces mientras viven
Tienen la Eternidad de la Naturaleza.
Pablo Neruda (Poeta Chileno)