Diario de un hombre joven, felizmente común:
Soy capaz y totalmente independiente, soy autosuficiente y dueño de mi destino. Tengo muchas metas en la vida porque puedo lograr lo que me proponga. Cuando llegue el momento formare mi familia, para entonces tendré un trabajo estable con el cual podré satisfacer todas nuestras necesidades y las mías claro. Siempre ayudare a mis parientes porque después de todo sin ellos no tendría nada. GRACIAS a su esfuerzo y al mió podremos alcanzar una mejor vida. Mientras se dan las circunstancias disfrutare mis momentos. Que mas puedo pedir mientas sea libre de pensar y hacer lo que desee, tener salud, tranquilidad y familia seré FELIZ
Diario de un hombre de 57 años, infelizmente común:
¡Mas cuentas que pagar!, el dinero no alcanza para nada parece que este fin de semana también me quedare sin dinero ¿será que no tengo derecho a distraerme?, ¡yo soy para todo en esta casa! Tengo que pagar la luz, el gas y para terminar de alegrarme el día la cuenta del teléfono esta por las nubes y por supuesto nadie me ayuda. Me levanto a trabajar todos los días pero eso nadie lo valora, aquí no soy más que un títere, existo para trabajar nada más. Me siento solo no tengo con quien hablar, mis hijos me toman en cuenta solo para pedir, mi esposa pelea conmigo día y noche sin motivo alguno, ya hasta dormimos separados, mientras tanto tengo que mantenerla, si no fuera tan necia no tendría que relacionarme con otra mujeres. Los errores son errores y después que se cometen no podemos hacer nada, yo no tuve la culpa las cosas pasaron y no las pude evitar, intento no mencionarlo para que mis hijos no pierdan el respeto hacia mí.
Mañana viajare a casa de mis padres, mamá esta enferma y tengo tiempo sin hablar con ella, tendré que darle para comprar las medicinas pero no será mucho porque con todos los gastos que tengo que hacer luego no me queda ni para echarle aceite al carro. Todo me sale mal, no soporto tanta mala suerte, lo único que tengo para calmar las tenciones es mi trabajo y los tragos con mis compadres y todavía la desconsiderada de mi mujer tiene los ovarios de pedirme más tiempo en la casa ¡no me jodas!
Ella nunca ha trabajado no sabe nada de las responsabilidades que tengo, ya me tiene cansado con el tema de la paz y la unión familiar, lo hace para molestarme como si no tuviera en otra cosa en que pensar ¿quien sale a trabajar eh? eso es lo importante tener para llenar el estomago pero nadie lo agradece en esta familia, mientras tanto me estoy enfermando. Lo mas triste que me puede pasar es no tener como sostenerme si un día no puedo seguir. Si pudiera pedir un deseo diría con el alma ¡que nazca en mi patio un árbol con dinero! es todo lo que necesito para resolver los problemas.
“Acaso ¿¡la familia fue la maldición para este hombre!?.... ¡pues no!, RESISTIRSE A SU PROPIO CAMBIO fue la causa de su desdicha. Perdió el sentido de su existencia olvidando sus prioridades, construyo una estabilidad ficticia para sentirse protegido pretendiendo proteger a otros, criticaba todo lo que tenia porque le faltaba voluntad para mejorarlo, deseaba estar solo pero nunca lo asumió. Sufría y no aceptaba que otros quisieran ayudarlo a sentir armonía. El orgullo fue lo que termino de empujarlo a vivir sin control de la situación convirtiéndose en el títere de las circunstancias.
Es irracional pero común en todos los que esperamos que el mundo cambien y se detenga a pensar en nuestros problemas mientras nos quedamos en el tiempo frustrados y deprimidos con un solo propósito en la en la mente, QUEJARNOS”.
