EL MACROTONTO

Publicado por humanopteros

EL MACROTONTO

Ciertos astutos de la época hacen sospechar que no estamos lucidos, que alguien mas evita las altas operas. Supremos hedores o técnicas de excentricidad sin definir.
Es así como gracias a los últimos avances de la tecnología y depurando las antes torpes herramientas, se han logrado localizar imbéciles palpitantes en sudor frío dentro de un sistema denominado por la ciencia como MACROTONTO.

Para llegar hasta allí un humano promedio debería discernir la piel de una mofeta y sobrevivir dentro de la estructura interna de un mandril.

Se calcula que las farsas de sus cerebros son tan diversas como el infinito y que en gordura y en sudor se asemejan a nuestros marranos, sin embargo superan a estos en barbaridades y colmillos.

Su perfume es horroroso y la estructura ósea es más fea y más débil que un reptil.
Se rumora que estos seres mongoloides adoran a una deidad porcina en la gran porqueriza, recinto que acumula lo peor de las especies sin lactancia y que a modo de ultra zoológico posee intestinos donde los visitantes contemplan las variadas poses de una galleta.

Existen en las ciudades de aquellos idiotas reptantes hediondos acuarios donde macrocefálicos profetas nadan y se aparean, dicen los mas obtusos que la sustancia que segregan son manchas para la reproducción en masa en un horno sin fondo.

Y sus vidas son detestables, practican sugestivos rebotes en la felación a distancia y el caldo de cuerpos. Su porvenir lo ven en una olla y en la nevera, gustan de trepar a los lomos de una piraña burbujeante.

A la hora de la alimentación les faltan calzas en los dientes, comen desechos del eructo de sus madres o chicharrones de polen que chorrea de un becerro. Sus fiestas son tan insoportables que hacen llorar a un buitre.

Y burros sin más son, perennes, perpetuos; la difteria para ellos es un divertimiento, una sagrada orgia; trepan los cerros de su mente con la gracia de un chacal y tienen la suficiente paciencia para comerse un masmelo mientras hacen del cuerpo.